Algunas cosas deberán cambiar, de eso estoy seguro, pequeños ajustes para reubicar el punto de vista de nuestras atribulaciones cotidianas, esta vez fui un poco mas certero tal vez y hasta soné demasiado dramático. Claro que también comprendí que magnificar demasiado lo que nos sucede, a esta edad no sirve para nada, solo aporta un poco mas de peso a nuestras ya cansadas espaldas.
Ayer, al instante siguiente de haber iniciado una caminata que pretendía ser de alivio a mis pesares y de haber pasado por una y mas alternativas que creí indispensables para poder seguir, incluyendo entre esas cosas la búsqueda de un interlocutor, tal vez un amigo o un familiar y el terapeuta?.
Caminé un rato largo, despacio, relajando la mente y el cuerpo, expuesto al fresco del crepúsculo y a las luces de la ciudad que de a poco se iba iluminando, transité por los caminos de la soledad absoluta hasta intentar dejarlo asi nomás o romper con todo, gran dilema.
Imaginé entonces un espacio físico para mi, indispensable refugio de mis angustias, probada terapia que me identifica ahora con mi padre, propietario de este método ancestral para desaparecer del mundo y que en sus años a nuestro lado, no supiera identificar el porque de esas ausencias.
La propuesta ahora sonaba a ruptura, lo mio es mio y lo tuyo es tuyo, mas lo que supuse ya no necesitaría, el silencio de su lado me dio la pauta del acierto, el primero de tantos intentos sonó a un acuerdo irrestricto entre las partes y me puse en marcha, estimulado por el proyecto.
Aqui estoy ahora, refugiado cuando necesito estarlo, alejado de aquellos espacios de conflicto, acompañado por mis asuntos y mis cosas, las mas indispensables cuando arrecia el temporal, la música potente, la máquina de escribir, los instrumentos, la televisión, el sillón y la cama.
Desde aqui veo el paisaje distinto, estoy mas arriba y se ve el cielo y las estrellas, las luces y la oscuridad, los tejados y la luna. Que bueno que lo hice posible, no fue difícil, solo un poco de dolor de espalda a mis años, no esta nada mal, espero que persista.
